Esta es una respuesta que escribí hoy, en "Voto Católico" con respecto a un artículo sobre las nuevas medidas de la actual Ministra de Educación, Gina Parody, en relación con la ideología de género, y específicamente es la respuesta a un comentario de una persona según la cual, las ideas religiosas (en especial las católicas) son erradas y no deberían enseñarse en los colegios...
Estoy cansado de la tal
ideología de género y que ahora nos la quieran meter hasta por las
narices.
La respuesta que aquí escribo y comparto, la he editado y mejorado con
respecto a la original.
La persona en cuestión dice, entre otras cosas, lo siguiente: "la
educación debe estar libre de ideas erradas del pasado, esos libros escritos
hace miles de años no sabían realmente lo que era el universo, ya hay que pasar
la página y darle paso a la evolución".
Ésta es mi respuesta:
"¿Y quién dice que son erradas? ¿Son erradas porque vienen de la iglesia?
¿Son erradas porque fastidian nuestra mal entendida "libertad"?
¿Quién eres tú o quien soy yo para decir lo que está bien o lo que está mal en
un mundo en el que ya todo es relativo? Si no te gusta un colegio católico,
pues manda a tus hijos a otra parte. ¿Por qué nos tienen que obligar a pensar
diferente? ¿Por qué no tengo derecho a creer en lo que yo quiero creer? ¿Por
qué ustedes pueden despotricar contra los católicos y por qué en cambio
nosotros no podemos decir nada, porque piensan que somos
"retrógrados", o peor aún, porque ustedes (los enemigos del
evangelio) creen que estamos "lavando el cerebro" u otras ideas
similares?
NO NOS PUEDEN IMPONER UNA IDEOLOGÍA BARATA QUE DESCONOCE LA ESENCIA DEL SER
HUMANO Y LA RIQUEZA INMENSA QUE APORTA AL DESARROLLO DE CADA PERSONA LAS
DIFERENCIAS NATURALES ENTRE HOMBRES Y MUJERES! NO, Y NO, Y NO!!!
Que cada quien piense lo que quiera, a mí déjenme ser lo que quiero ser. Yo no
pretendo imponer mis ideas, que otros tampoco me las impongan. Yo quiero seguir
viviendo según mis principios y quiero que mis hijos sean católicos porque
creo, firmemente, que es lo mejor que les puedo dar... Y estoy en todo mi
derecho de hacerlo.
Educar (bien, con una pedagogía asertiva, participativa y crítica) bajo
principios católicos o bajo principios musulmanes o bajo cualquier principio
religioso no significa coartar la libertad de nadie, significa dar a las
generaciones futuras un elemento esencial para enfrentar la vida, para superar
muchos obstáculos, para dar una identidad necesaria en el desarrollo
psicológico de cada persona. Que haya muchas personas que sean anti-testimonio
de la religión que profesan no significa, en absoluto, que la religión sea mala
per se y mucho menos que los principios fundamentales de cada una estén
errados... Debemos entender, de una vez por todas, que somos humanos y por
consiguiente nos equivocamos, más allá de nuestras creencias porque, aún a pesar
nuestro, aquello en que creemos no siempre rige nuestros comportamientos, ni
nuestras acciones cotidianas. ¿Y por qué? En parte porque ahora todo está bien,
lo cuál es falso, absolutamente falso; en parte porque nos han vendido la idea
de que somos amos y señores del mundo (y también de los demás) y eso no es
verdad; en parte porque nos han vendido la idea de que la religión coarta
nuestra libertad, lo cual tampoco es cierto; en parte porque la sociedad
consumista que nos hemos inventado es la que, sin darnos cuenta, coarta las
libertades individuales y nos hace creer que somos "todopoderosos" y
por consiguiente Dios es "un invento que ya no hace falta"...
No obstante, Dios nos ama, lo creamos o no. Y, aunque a algunos no les guste, o
no lo quieran entender, sólo Uno ha dicho de si: "Yo soy el camino, la
verdad y la vida".
El evangelio no pasa de moda, por el contrario sigue siendo actual, es y
seguirá siendo una propuesta de vida que va más allá del tiempo y del
espacio.
JBV, 16 de junio de 2016